Una gran colisión entre dos estrellas será observable desde la Tierra en el año 2022

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    Una gran colisión entre dos estrellas será observable desde la Tierra en el año 2022
    Investigadores de Estados Unidos han analizado el comportamiento de una formación binaria en la constelación del Cisne.

    En el año 2022, dos estrellas que orbitan juntas en la constelación del Cisne o Cygnus se fundirán y ello ocasionará una gran explosión -una nova roja luminosa- que será visible desde la Tierra, es decir, que desde las Baleares será visible porque será un fenómeno que el resultado obtenido quedará permanentemente en el firmamento según muestran las previsiones astronómicas elaboradas por profesor Larry Molnar y sus estudiantes en la Universidad de Calvin (Grand Rapids, EEUU). La estrella binaria se encuentra a 1.800 años luz de la Tierra.

    ¿LO VEREMOS EN TIEMPO REAL? ¿PODREMOS VERLO A SIMPLE VISTA?
    No, de hecho, esto sucedió hace casi 2.ooo años. Concretamente según los científicos en el año 43 d.C. Pero debemos pensar que estas dos estrellas están situadas a 1.800 años de luz de la Tierra, y que toda esa luminosidad y toda esa cantidad de energía lumínica está viajando a través del espacio desde hace casi 2.000 años, pero… el evento lo veremos a partir del 2.022.
    La predicción de Molnar, que propuso de forma teórica ya en el 2015, se está cumpliendo tal y como él advirtió. «Hay una posibilidad entre un millón de que se puede predecir una explosión», y por ese hecho Molnar está muy satisfecho. (Imagínense el orgullo de que se cumpla algo tan difícil y que él ya predijo)

    ¿CÓMO PODREMOS DETECTAR ESA EXPLOSIÓN? ¿POR EL BRILLO?
    Concretamente, se espera que la actual estrella binaria aumente su brillo unas 10.000 veces y, durante aproximadamente un año, sea una de las estrellas más brillantes del firmamento. De este modo, será visible como parte de la constelación del Cisne, y añadirá una estrella al patrón estelar reconocible de la llamada Cruz del Norte.

    ¿CUANDO SE DIERON CUENTA DE QUE ESTO IBA A SUCEDER?
    Molnar comenzó a monitorear la estrella conocida como KIC 9832227 en el 2013. Asistía a una conferencia cuando su colega Karen Kinemuchi presentó su estudio de los cambios de brillo de la estrella, que concluyó con una pregunta: ¿Es pulsante o binaria? En la misma conferencia se encontraba el entonces alumno Daniel Van Noord, asistente de Molnar, que se tomó la pregunta como un desafío personal y comenzó a observarla.
    «Miró cómo el color de la estrella estaba correlacionado con el brillo y determinó que era definitivamente una binaria». De hecho, descubrió que en realidad era una estrella binaria de contacto, porque ambas comparten una atmósfera común.

    ¿QUÉ MODELO DE CÁLCULO HAN REALIZADO PARA SABER TODO ESTO?
    «A partir de ahí, Van Noord determinó un período orbital preciso a partir de los datos dela sonda Kepler (poco menos de 11 horas) y se sorprendió al descubrir que el periodo era ligeramente inferior al mostrado por datos anteriores».
    Este resultado les recordó el trabajo publicado por el astrónomo Romuald Tylenda, que había estudiado los archivos de observación para ver cómo otra estrella (V1309 Scorpii) se había comportado antes de que explotara inesperadamente en el 2008 y produjo una nova roja (un tipo de explosión estelar recientemente reconocido y distintos de otros tipos). El registro de preexplosión mostró un sistema binario de contacto con un periodo orbital decreciente a una velocidad de aceleración. Para Molnar, este patrón de cambio orbital fue una clave para interpretar los nuevos datos.

    Molnar observó que este descenso de velocidad se producía tambIén en el 2013 y el 2014, y al año siguiente presentó sus resultados a la Sociedad Astronómica Americana, señalando que KIC 9832227 puede seguir los pasos de V1309 Scorpii y que está completamente seguro de ello. En los dos años posteriores, Molnar y su equipo exploraron todas las interpretaciones alternativas a su conclusión y las descartaron.
    Por ello, seguirán observando la estrella con diferentes telescopios espaciales. «Si la predicción de Larry Molnar es correcta, su proyecto demostrará por primera vez que los astrónomos pueden capturar ciertas estrellas binarias en el momento de morir, y que pueden rastrear los últimos años de una espiral estelar de la muerte hasta el punto final, dramático de la explosión», añade Matt Walhout, decano de investigación en Calvin.

    REFLEXIÓN PERSONAL
    Por primera vez en la historia, los padres podrán señalar a un punto oscuro en el cielo y decir: ‘Mirad, niños, hay una estrella escondida allí, pero pronto se va a iluminar'».

    “LA MISTERIOTEKA” de David J. Fernández

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