Tras el bombazo informativo de estos días era lógico que alguna empresa pusiese sobre la mesa una oferta laboral para los (ex) duques de Sussex, esto es, Harry y Meghan Markle. Las historias de famosos siempre gustan, y más si hay un culebrón en medio.
Lo que no esperábamos era que Netflix tuviese un puesto laboral para ambos. Para Meghan sí, ella es actriz ¿Y Harry? Pues como ha comunicado el director de contenidos de la empresa, Ted Sarandos, durante la entrega de galardones del Sindicato de Productores (PGA, en inglés), el gigante de streaming tiene reservado un lugar para el príncipe Harry y Meghan si ellos estuvieran interesados, tal y como adelanta Fotogramas.
¿Estamos hablando de crear un programa sobre la historia? No se sabe si el matrimonio tiene pensado vender la historia (y si la Casa Real británica los dejaría), pero todo apunta a que los dos emancipados bien podrían forjar un nuevo camino a través del entretenimiento. «¿A quién no le interesaría? Sí, claro», dijo Sarandos.
Sin embargo, parece que Netflix no es el único. Se rumorea que otros gigantes del streaming estarían también intentando trabajar con la pareja ahora independiente y con nuevo destino en Canadá. Es más, es posible que incluso Netflix ya llegue tarde con la propuesta, si es que ya la hecho. Como recoge Movieweb, Disney ya habría movido ficha y habría dado a Meghan un papel de voz en off en algún show del estudio. Es más, hace unos días The Mail on Sunday publicaba un vídeo del príncipe Harry promocionando las habilidades de voz de su esposa junto al director ejecutivo y presidente de Disney, Bob Iger, durante la presentación del remake de ‘El Rey León’.
Por lo tanto parece que la batalla por Harry y Meghan Markle será entre Netflix y Disney, si es que realmente termina habiendo una oferta laboral que les interese a ellos.
Por otro lado la comunicadora y filóloga inglesa Amanda Jeffrey ha analizado para IB Magazine la situación generada en la casa real británica.
El príncipe Harry y Meghan Markle lograban liberarse del yugo que les ataba a la monarquía británica. Ella empezó a sentirse incómoda con la atención que la prensa le dedicaba. Fue durante un viaje a África que la pareja avisó de sus intenciones. Concedieron una entrevista donde aseguraron que tomarían medidas legales contra ciertos tabloides. Eso puse en jaque a la reina, cuya relación con los medios siempre ha sido de no intrusión. Mientras tanto, la relación de Harry con su hermano se resentía. La grieta entre ambos era cada vez más evidente. El príncipe Carlos se puso de parte de su hijo mayor.
