¿ES REALMENTE UNA LEYENDA LA DE “EL SALT DE LA BELLA DONA”?
Yo creo que deberíamos empezar esta sección hoy dedicada a una leyenda, haciendo un poco hincapié en el encanto que tiene esta isla como es la de Mallorca. En definitiva, todo el archipiélago balear tiene rincones y playas paradisíacas y una magia especial además de un clima mediterráneo envidiable que es el principal factor por el que tantos y tantos cientos de miles de turistas nos visitan cada año e incluso muchos de ellos se quedan aquí a vivir. Pero Mallorca no solo es playa, no solo es clima, no solo son aguas transparentes y cristalinas, sino que también existe una isla de Mallorca mágica, una Mallorca de leyendas e historias increíbles que para mucha gente pasan desapercibidas. Hoy vamos a hablar y analizar una leyenda que muchos dicen que no es tal leyenda, sino que realmente pasó. En cualquier caso, es una historia trágica pero cargada de amor y sentimientos.
Existe una mallorca mágica, una isla llena de leyendas e historias increíbles que para mucha gente pasan desapercibidas
Lo que a mucha gente le llama la atención cuando llega a Mallorca, es la majestuosa imagen de una imponente Serra de Tramontana que se alza y discurre al norte de la isla. Y como digo, esta Serra de Tramuntana es uno de los enclaves más bellos de la isla, pero es que además la Serra de Tramontana está plagada de historias como la que hoy nos atañe, la de una chica que muere, pero su espíritu sigue rondando por ahí a día de hoy… dicen algunos…
Me estoy refiriendo a la leyenda de El Salt de la Bella Dona, que según nos cuenta hubo una vez un lugar situado entre el Monasterio de LLuc y la localidad de Inca, donde vivía una chica. Una chica que muchos la describen como una chica enormemente atractiva, con una mirada penetrante, de dulce rostro y personalidad reservada… o tal vez tímida. Era tal su belleza que su presencia se hacía notar cuando ella llegaba al pueblo y los comentarios entre los chicos eran evidentes, cosa que a su chico, no le hacía mucha gracia y le provocaba unos terribles celos.
La chica era muy religiosa y muy devota de La Mare de Deu de LLuc y casi a diario recorría el camino desde su pueblo (unos dicen Caimari, otros dicen Selva), hasta el monasterio de Lluc para poder rezarle a La Mare de Deu de Lluc.
Su pareja, cansado de aguantar y soportar las miradas de los chicos del pueblo por la belleza de su amada y abordado por los celos que esto le provocaba, un día le dijo que si le parecía bien que él la acompañara hasta el Monasterio de Lluc a lo que ella aceptó encantada.
Al día siguiente, comenzaron su ruta hacia el monasterio por el camino viejo de Lluc. Cuando llevaban ya un buen trecho del recorrido, el chico le sugirió a ella que deberían descansar un rato y beber un poco de agua para recuperarse un poco del cansancio. Así lo hicieron y se detuvieron en un desfiladero llamado “Es Grau”, un precioso desfiladero donde existe un marco incomparable de la comarca de Es Raiguer de Mallorca”.
Él expresa su fascinación por el desfiladero y por las increíbles vistas que desde allí se pueden ver. Lo hizo con tanto entusiasmo que provocó que ella, la chica, se asomase por el desfiladero para observar ese regalo para la vista.
Pero era tal el rencor de los celos que él tenía por los chicos del pueblo, que, en un arrebato de celos, empujó a la chica por desfiladero haciendo que esta cayera al vacío.
Él escuchando cómo la chica gritaba mientras caía al vacío, se da la vuelta y continuó el camino hacia el monasterio. Pero parece ser que el arrepentimiento hizo mella en su conciencia y tenía intención de llegar al monasterio y pedir perdón a la Mare de Deu por la atrocidad que había cometido al arrojar a su novia por el desfiladero.
Pero cuando llegó al monasterio para rezar y pedir perdón… observó que su novia, la mujer que él amaba y que hacía unos minutos había arrojado por el desfiladero, estaba arrodillada delante de la Virgen y que, al verlo a él, se levantó lentamente, se acercó a él y le dijo que estaba perdonado. Él la abrazó llorando pidiéndole perdón encarecidamente y regresaron a su pueblo.
Esta es una de tantas leyendas que componen la Mallorca Mágica y Misteriosa y que muchos desconocen…
David Fernández,experto en ciencia, evolución y misterio