El restaurante japonés ROKA bajó el telón en Cap Vermell Grand Hotel tras una nueva temporada de éxito. Su paso por Mallorca, en formato pop-up desde el pasado 19 de junio, ha vuelto a convertirlo en una de las propuestas más codiciadas y de moda del verano mallorquin. Con largas listas de espera y un público local así como un importante número de clientes internacionales que viajan expresamente para disfrutar de la icónica robata en vivo en el paradisíaco y exclusivo entorno de Cap Vernell Grand Hotel , ROKA ha vuelto a atraer a numerosos comensales durante el verano, pero ha sido el conjunto de la oferta gastronómica de Cap Vermell Grand Hotel lo que ha consolidado una temporada marcada por la excelencia y la calidad gastronómica.

El gran estandarte es VORO, dirigido por el chef Álvaro Salazar y reconocido con dos estrellas Michelin y dos soles Repsol, que reafirma su condición de templo gastronómico en Baleares. A esta propuesta se suman los restaurantes propios del hotel tales como Balearic Restaurant, con una cocina mediterránea enraizada en la tradición local; Tapas Bar, que ofrece una visión moderna de la cocina española; Ses Oliveres, con un ambiente abierto al paisaje mallorquín y Hedonist Club, en el Country Club, especializado en gastronomía saludable.

Para Cap Vermell Grand Hotel, la gastronomía es mucho más que un servicio, es parte de su identidad como resort integral de lujo. Cada temporada, el hotel refuerza su compromiso con el producto local, con la sostenibilidad y con una cocina que combina técnica, autenticidad y creatividad.
Con el cierre de ROKA, el hotel hace un balance muy positivo de este pop up y se consolida como un destino gastronómico top en Mallorca y en el Mediterráneo, capaz de atraer tanto a residentes como a visitantes internacionales en busca de experiencias exclusivas.