PURA VIDA

Seguimos estrenando año, aunque en un plis plas ya nos plantamos en carnaval. Superados los turrones y también sant Antoni, saboreamos sant Sebastià entre contentos y hartos de tanta fiesta.

Empezamos el año cargados de propósitos y una fórmula matemática ya nos ha querido chafar el ímpetu: el Blue Monday, otro invento importado. El día más triste del año, entre otras cosas, al parecer, porque  no hemos cumplido los deseos de Año Nuevo. ¿No nos estaremos pasando? ¿No es demasiado pronto para autoevaluarnos? Ya sabemos que la vida se escribe mientras hacemos planes, y por ello mejor deseemos a diario, pasito a pasito, como dice la canción.

Con el nuevo año también recapitulamos sobre nuevas palabras que incorporamos a diccionarios oficiales  y oficiosos. Me encanta una: sapiosexual, aunque difiero de lo que indica la estadística. Un 8 por ciento de personas dicen enamorarse de este prototipo, simplemente personas altamente inteligentes, que dirigen la seducción desde el cerebro y hacia el oído. Difiero porque creo que somos muchos más los que valoramos algo brillante dentro de una cabeza, sea ésta hermosa o no. La inteligencia es sexy desnuda. No necesita vestidos, ni perfumes ni rituales. Ya lo decía Marylin Monroe, acostumbrada como estaba a hacer de rubia tonta, aunque fue una actriz muy inteligente interpretando un papel magistral: que Albert Einstein era el hombre más seductor que había conocido nunca.

Así que seamos optimistas que el año no ha hecho más que empezar y tras unos propósitos vienen otros. De eso se trata, de ir teniéndolos, porque de ilusiones nutrimos nuestra pura vida.

Lina Pons. Periodista.

Escucha el Podcast: