Más de una treintena de torres y atalayas de Mallorca se iluminarán este sábado en el marco de la segunda edición de una iniciativa que tiene por objetivo reivindicar la conservación de este patrimonio histórico y sensibilizar a la ciudadanía sobre el drama que sufren las personas refugiadas.
Las encendidas con señales de humo y luz se llevarán a cabo a las 13.00 y a las 18.15 horas de este sábado, según ha informado en un comunicado el Consell de Mallorca.
En cada una de ellas se leerá un manifiesto en defensa de la conservación de este patrimonio histórico y para denunciar la situación y las condiciones a las que están sometidos muchos refugiados hoy en día «mientras los países miembros de la UE incumplen reiteradamente sus propios acuerdos».
Desde la institución insular han asegurado que el listado de entidades y espacios costeros adheridos en la iniciativa todavía sigue aumentando, puesto que sigue abierta la posibilidad de inscripción.
El vicepresidente primero y conseller insular de Cultura, Patrimonio y Deportes, Francesc Miralles, ha explicado que este gesto «es una manera de arreciar el compromiso de la institución con la dignidad de los derechos humanos y la denuncia del drama de los refugiados».
Respecto a la reivindicación de la conservación del patrimonio, Miralles ha recordado que desde el Servicio de Patrimonio del Consell ya se ha iniciado este año la restauración de cuatro torres de defensa en Cala Pi, Banyalbufar, Alcúdia y Andratx.
Asimismo, el proyecto cuenta un año más con la implicación de los impulsores de este proyecto nacido en 2017 a partir de un grupo de profesores del IES Marratxí y miembros de la Sociedad Balear de Matemáticas.
Por su parte, el coordinador de la campaña ‘JoAcull’ de Amnistía Internacional, Carlos Martín, ha afirmado que «la situación de las personas refugiadas en el Mediterráneo es cada vez más desesperada» y ha agradecido al Consell que haya cogido el testigo de este proyecto.