E-commerce, cómo vender en internet

Vivimos una época en la que ni nuestra vida social ni la empresarial están limitados por temas geográficos. Las nuevas tecnologías han barrido fronteras, por lo que hoy más que nunca puedes plantearte tener un negocio global. Hoy explicamos como crear un e-commerce para llevar nuestro producto o negocio a cotas inimaginables hasta ahora.

E-commerce

En los últimos años ha habido un boom de creación de e-commerce (tiendas online), sobre todo en esta época que vivimos de post-crisis en la que muchísimas empresas o start-ups se quieren subir al carro de este tipo de negocio.

Las ventajas que ofrece un negocio online son numerosas:

  • Aumento de la zona de influencia de la empresa (se eliminan los límites físicos del negocio).
  • Abierto 24 horas al día, 7 días a la semana, 365 días al año.
  • Menos personal para atender a un mayor número de clientes.
  • Menos gastos fijos (no es necesario tener una tienda física, por lo que puedes ahorrar en alquileres, electricidad, seguros…).

Pero no todo es color de rosa. Que nadie piense que es abrir una tienda online y esperar a que le ingresen el dinero. Hay que trabajar, ser paciente e insistente y, sobre todo, rodearse de buenos profesionales que nos acompañen en tan emocionante singladura.

Desde IB Magazine queríamos ofrecer una master class de todos los pasos y agentes que intervendrán en el periplo de creación de un e-commerce centrándonos en la parte tecnológica, ya que no entraremos en temas de estrategias financieras (estudios de mercado, planes de empresa, etc). A pesar de esto, no olvidemos que debemos realizar un estudio previo o trabajar con asesores profesionales para que todo el proceso esté correctamente previsto, lo que incrementará la velocidad de desarrollo y la posibilidad de éxito del negocio.

  1. PRODUCTO: Por supuesto lo primero es tener un producto que vender, obviamente.
  2. DÓNDE VENDER: La venta online permite acceder a mercados de que otra forma sería muy difícil. Nuestro mercado objetivo crece de forma espectacular, pero también algunos detalles a tener muy en cuenta:
    1. TRANSPORTE: Una vez que tenemos nuestro producto o productos definidos, debemos decidir dónde queremos vender. Este paso es muy importante, ya que si el producto es físico, debemos tener en cuenta la empresa de transporte que se encargará de los envíos. Hoy en día este tipo de empresas está viviendo una época dulce, ya que crece en la misma medida que el comercio online, y suelen tener soluciones tecnológicas muy adaptadas a las necesidades de un e-commerce.
    2. IDIOMAS: Dónde queremos vender también influye a los idiomas en los que tendrá que ir las comunicaciones. Una de las  principales características del e-commerce es la posibilidad de venta internacional. De hecho es lo que más atrae a empresas tradicionales, poder ampliar su cartera de clientes a rincones del mundo inaccesibles para ellos hasta este momento. Pues algo muy a tener en cuenta es los idiomas en los que se ofrecerá el producto y la capacidad de comunicación con clientes en su idioma (que la hay, lamento decir que no todo se hace de forma automática) para servicio pre-venta y post-venta.
  3. E-COMMERCE: Nuestra tienda online debe representarnos de forma eficiente y atractiva. La competencia en todos los sectores en internet es feroz, y si queremos destacar será muy importante tanto que nuestra tienda tenga las funcionalidades necesarias para todo el proceso de venta como que entre por los ojos, incluso que destaque de la competencia. Para esto es necesario un buen trabajo tanto a nivel diseño como a nivel programación.
    1. DISEÑO E IMAGEN CORPORATIVA: Si tu empresa es un nuevo producto o una nueva start-up es muy importante el naming, la imagen corporativa y el diseño del sitio web. Y la creación del naming no es tan sencilla ni tan anárquica como pueda parecer, ya que hay un elemento que es tremendamente importante que irá muy relacionado: el dominio. Es la dirección web por la que te encontrarán, y sobre todo por la que te encontrará Google, aunque luego hablaremos más de ello.
    2. PROGRAMACIÓN: Aquí tenemos tres posibilidades, usar una plataforma de venta online ya funcional (como Amazon o e-bay) con lo que la programación es 0, aunque estás luchando con la competencia en la misma plataforma. Si te decides por crear tu propia web (no excluye tener tus productos replicados en, por ejemplo, Amazon), tienes a su vez dos opciones: usar un CMS (Content Management System, sistema de gestión de contenidos) comercial o una solución AD-HOC para el proyecto, es decir programada línea a línea de código. Esto último se traduce en más tiempo, lo que significa más costo, pero puedes personalizar el tipo de venta y todos los detalles relacionados con tu negocio hasta donde necesites. Si escoges un CMS comercial, las soluciones son más habituales son WordPress, Prestashop o Magento, y aunque parece que es instalar o vender, garantizo que la intervención de un buen programador y un diseñador será totalmente necesaria.
  4. HOSTING: Un elemento fundamental, donde se alojarán los archivos del e-commerce. Siempre recomendaré contratar el hosting en el país, por dos razones, latencias menores en las conexiones para actualizaciones, lo que implica mayor velocidad de trabajo, y por temas legales, de responsabilidad en caso de problemas en los servicios o, algo que hay que tener en cuenta, el cumplimiento correcto de la LOPD (ley de protección de datos).
  5. SSL, secure socket layer. Capa de seguridad que asegura al cliente que las comunicaciones están encriptadas, importantísimo dado que siempre da reparo comunicar datos de pago y financieros (como un número de cuenta o datos de la tarjeta de crédito). También certifica los datos de la empresa que hay detrás, por lo que es mucho más difícil que esa tienda online sea un fraude. Además, cuando naveguen por tu e-commerce el usuario verá en la barra de dirección del navegador el candadito verde que tanta confianza da al comprador.
  6. TPV VIRTUAL: Sistema de pago de productos y servicios mediante tarjeta bancaria. Hay que negociarlo con una entidad bancaria, ya que cobran comisiones por cada venta (cada vez menores, todo hay que decirlo). La entidad bancaria te ofrece las herramientas informáticas que un programador tendrá que integrar, y a cambio tus clientes podrán pagar de la forma más segura hasta el momento.
  7. LOPD: Ley oficial de protección de datos. Hay que tener muy presente el cumplimiento de esta ley, ya que para el correcto funcionamiento el usuario seguro que tendrá que aportar datos personales, y estos tienen que estar auditados por un servicio legal y publicados en la oficina de protección de datos.

Y con esto, tenemos la tienda online montada y preparada para vender. Pero a partir de aquí comienza una serie de trabajos periódicos  de mantenimiento y comunicación si quieres tener éxito en las venta, y son:

  1. Mantenimiento del E-commerce, productos, comunicación con clientes, y, sobre todo, seguridad. Hoy en día los ataques son constantes, y evolucionan día a día, por lo que tener un buen control de la seguridad es vital.
  2. Marketing Online: muchísimas opciones, aunque las más exitosas actualmente en general son Google Adwords, Facebook Ads y Newsletter.
  3. Redes sociales: Por todos es sabido la importancia de tener presencia en redes sociales y potenciar nuestra reputación online. Estadísticamente, cada vez es mayor el porcentaje de visitas provenientes de social media.
  4. SEO (Search Engine Optimization): Acciones y técnicas para posicionar tu sitio web y tus productos en los buscadores (Google), y que hasta los 6 meses después de la publicación de la web no tienes en posición óptima.

¡Ah!, y por supuesto, tener un buen producto, un precio competitivo y un buen servicio post-venta.