Los nuevos títulos, tu próxima lectura, las novedades en librería te las contamos en IB Magazine, y para la ocasión, entrevistamos al periodista e historiador Diego Carcedo, para hablar del último libro que acaba de publicar “Sobrevivir al miedo. Un reportero frente al horror”.
En este trabajo cuenta su experiencia como corresponsal y enviado especial de guerra en RTVE, entre otras historias relata las experiencias que vivió en los distintos conflictos bélicos que fue a cubrir durante su carrera profesional. Vietnam, Sáhara Occidental, Filipinas, Cisjordania, Yibuti, Camboya, Perú, Mali …., en todos ellos ha vivido situaciones atravesadas por el miedo que vienen a demostrar, una vez más, que la realidad casi siempre supera a la imaginación.
Diego Carcedo ha asistido a guerras, revoluciones y terremotos, pero ha vivido para contarlo
¿Porque has decidido, precisamente ahora, escribir este libro?
No sabría decir porqué no atiende a ningún aniversario ni fecha especial, el verano pasado no pude viajar en vacaciones por razones familiares y casi sin pensarlo empece a escribir el libro y relatar esa cantidad de experiencias que he vivido frente al miedo y el horror, supongo que también fue motivado por todas aquellas personas que en mas de una ocasión me habían animado a escribir un libro relatando todas aquellas historias que alguna vez ya les había contado.
Es un conjunto de 20 episodios muy distintos entre si, algunos se refieren a las guerras en las que he estado, conflictos armados revoluciones, terremotos y otros son de otras noticias que se produjeron en las que también estuve presente como periodista.
¿Te siguen mortificando algunos de los recuerdos, sonidos e imágenes, de las situaciones más difíciles que has vivido?
Sí, los recuerdos cuando son muy fuertes e implican angustia y miedo no se olvidan nunca, como es lógico se imponen con mucha frecuencia y más de una noche siguen sobresaltándome.
El año pasado se cumplieron 50 años de la evacuación de Saigón, lo que supuso el final de la guerra de Vietnam , concretamente en abril de 1975, viviste las últimas y dantescas horas de la evacuación de Saigón…
Tengo todos estos recuerdos muy recientes y con el libro he vuelto a profundizar mucho en ellos, a lo largo de estos cuarenta años cada ves que se cumple algún aniversario de alguna guerra se vuelven a reproducir las imágenes tanto en los medios como en mi propio pensamiento. Cuando oigo hablar de los conflictos en los que he estado instintivamente reproduzco las imágenes en mi pensamiento y sobre todo la dureza de las sensaciones que me transmitían, en Vietnam se paso mucho miedo.
El miedo es el vector de un título en el que Diego Carcedo ha buscado variedad geográfica, temporal y temática.
Hay tres capítulos con los diferentes episodios que reflejan la entrevista que le hice a Idi Amín Dada, presidente de Uganda, un personaje muy siniestro y un total asesino, era un personaje muy mítico y todos querían entrevistarle. Yo conseguí llegar hasta el y hacerle una entrevista, fueron unos días muy tensos y complejos junto al equipo. Para mi fue el mayor éxito profesional que he tenido en mi carrera, tuvo una gran repercusión mundial.
Hace no tantos años aun era más complicado retransmitir desde el extranjero y más aun en zonas de conflicto, los equipos no eran ligeros y las conexiones complicadas. ¿Cómo ha cambiado la tecnología el mundo del reporterismo?
La tecnología ha ayudado muchísimo, ahora es mucho más sencillo transmitir en directo, mandar imágenes al momento, pero el periodismo ahora no es más fácil, es mucho más exigente. Antiguamente por lo primero que tenias que preocuparte era en poder entrar en el país en conflicto, si lograbas entrar, el equipo debía buscarse la vida para encontrar donde y cómo transmitir las crónicas y hacer llegar las imágenes y videos, además de investigar lo que estaba pasando para explicar a los espectadores la realidad exacta y rigurosa de la situación o del conflicto.
Es tan difícil cubrir guerras como sobrevivir diariamente al periodismo cotidiano
¿Como empezaste a ser corresponsal de guerra?
Bueno esto vino solo, una cosa es ser corresponsal fijo en una zona bélica o enviado especial para cubrir un hecho puntual, un día empece como enviado especial y como me había ido bien, en la redacción volvieron a ofrecerme cubrir otro conflicto y así sucesivamente.
Más de una bala te ha rozado la cabeza ….
Más de una, pero de una bala que te roza no debes preocuparte porque significa que esa no te mata. He estado en muchísimos sitios donde una bala podría haberme alcanzado en cualquier momento pero curiosamente la vez que he estado más cerca de morir fue un día lejos de zonas de conflictos, en el que simplemente estaba en una cafetería, mientras me limpiaban los zapatos una bala perdida casi me mata. La suerte se puede acabar en cualquier momento y en cualquier situación, nunca se sabe los que nos deparará la vida.
LOS REPORTEROS SOMOS UN BLANCO FÁCIL PARA LOS ATRACADORES EN LAS ZONAS DE CONFLICTO, SI PIENSAN QUE PUEDES LLEVAR ENCIMA DINERO PUEDEN MATARTE PARA CONSEGUIRLO
Has llegado a grandes personalidades a las que nadie ha podido entrevistar, ¿cómo lo has conseguido?
No lo se, no soy nada simpático, supongo que la constancia y la obstinación es lo que me ha llevado a conseguir abrir puertas que parecían infranqueables, además de mucha suerte. No he cumplido todas mis ambiciones ni mucho menos, he ganado muchas veces pero en ocasiones también he fracasado.
He regresado como turista a muchos de los sitios donde estube cubriendo alguna guerra pero curiosamente aun no he vuelto a Vietnam
Haciendo un poco de reflexión sobre la forma de hacer televisión de hoy día, tomando como ejemplo el caso de Julen y la repercusión que ha tenido. ¿espectáculo o noticia?
Ha sido muy lamentable, apunta Carcedo, hemos pasado de ofrecer las noticias con seriedad, con profesionalidad y con rigurosidad a darlo todo por el morbo. Es muy preocupante, desprestigia la profesión y crea un ambiente social deplorable. Desde luego no dice nada bueno de estos medios de comunicación que están queriendo ganar espectadores de cualquier manera con cualquier recurso y a costa de quien sea sin darse cuenta del daño que hacen a la sociedad en general.
Los buenos periodistas, informan con rigor y con respeto total a la verdad, evitando precisamente el morbo.
Diego Carcedo es periodista e historiador. Se inició como reportero en La Nueva España. De allí pasó a trabajar en la agencia Pyresa y, en 1974, en TVE. En el ente público, formó parte del equipo del programa Los reporteros y ejerció de corresponsal en Lisboa y en Nueva York. Fue también director de los Servicios Informativos de TVE y director de Radio Nacional de España. Entre 1996 y 2007 fue miembro del consejo de administración de RTVE y en 2018 presidió el comité de expertos que evaluó las candidaturas al mismo organismo. Es presidente de la Asociación de Periodistas Europeos, columnista de las cabeceras de Vocento, colaborador esporádico de numerosos medios y conferenciante habitual. Es, además, autor de Fusiles y claveles (1999); Entre bestias y héroes (2011), que ganó el Premio Espasa de Ensayo, y Un español frente al Holocausto (2013), entre otros.
Escucha PODCAST de la entrevista a Diego Carcedo.